Inteligencia artificial en el marketing
En una sociedad en la que la digitalización es parte del día a día y donde nuestra huella digital es cada vez más grande, la Inteligencia Artificial viene para hacer uso de la gran cantidad de datos que generamos. Entre los campos en los que esta tecnología puede aportar, vamos a ver en qué consiste y qué aplicaciones hay de la inteligencia artificial en el marketing.
Marketing e Inteligencia Artificial
El uso de inteligencia artificial en marketing se hace para automatizar decisiones basadas en datos recogidos, analizar datos y observar y usar tendencias que puedan surgir tanto en la audiencia como en la economía en general y que puedan ayudar a un mejor impacto en los usuarios.
La inteligencia artificial en el marketing usa perfiles de usuarios para aprender a comunicarse mejor con ellos y dirigir a cada usuario mensajes personalizados sin la intervención directa de equipo humano. El uso de gran cantidad de datos ayuda también a predecir las demandas del usuario y ofrecerle lo que necesita incluso antes de que lo busque (un ejemplo que vemos a diario es cuando empezamos una búsqueda en Google y nos salen sugerencias de búsqueda con el texto que vamos introduciendo). Publicar el anuncio en la mejor ubicación para cada cliente o perfil de cliente es otra de las aplicaciones que ayudan a maximizar el valor de las campañas aumentando el ROI.
La inteligencia artificial también es cada vez más útil en la redacción de contenido. La tecnología es capaz de procesar el lenguaje natural y aprender de su estructura para redactar un contenido de calidad y cada vez más parecido a como lo puede hacer una persona. Además, la rapidez en el procesamiento de datos permite ofrecer contenido personalizado al usuario.
Además, obtenemos aplicaciones como la segmentación de clientes, predicción de ventas y atención de primeras dudas mediante chatbots (aplicación que simula y procesa conversaciones en lenguaje natural) que permiten una primera atención al cliente 24/7.
Estos son solo algunos puntos en los que la inteligencia artificial puede apoyar e impulsar al marketing digital, pero al ser una tecnología con mucho potencial aún por desarrollar y que dispone cada vez de más datos, las posibilidades en el futuro son múltiples.
Ejemplos de Inteligencia Artificial en Marketing
Por supuesto ya hay empresas aplicando inteligencia artificial en sus acciones de marketing, por lo que podemos observar algunas de sus aplicaciones:
- Netflix. Es conocido que esta compañía usa un algoritmo de recomendación de contenido basado en inteligencia artificial. A partir del historial de series y películas consumidas por el usuario y, teniendo en cuenta datos como la hora y el día, Netflix usa los metadatos de películas y series así como sus argumentos para una recomendación personalizada. También usan inteligencia artificial para determinar en qué regiones funcionaría mejor cada contenido y dirigir así de forma específica sus campañas de marketing.
- Starbucks. Esta empresa usa su tarjeta de fidelización para registrar los pedidos del cliente, donde se hicieron e incluso la hora y el día. Con estos datos, lanza a través de su aplicación mensajes personalizados de marketing cuando el cliente se acerca a un local, así como ofertas especiales.
- Amazon. Este gigante usa Amazon Personalize, una tecnología de recomendación de productos que usan compañías como Domino’s, Yamaha o Subway.
- Uber. Esta empresa usa inteligencia artificial para generar precios dinámicos de acuerdo con la demanda que pueda existir en cada zona, así como para intentar detectar el estado del cliente mediante la forma en que usa la aplicación. De esta forma, si la inteligencia artificial detecta que un cliente está en estado ebrio, procurará enviar a un conductor experimentado para realizar el servicio.
El futuro de la inteligencia artificial en el marketing
El futuro de esta tecnología en el campo del marketing tiene tanto potencial como en otros muchos campos. De hecho, se estima que en 2025 el 95 % del consumo se hará usando inteligencia artificial. Apenas se están empezando a explorar las posibilidades que ofrece y, aunque hay literatura fantástica que nos dice que las máquinas reemplazarán al ser humano, y ciertamente puede obtener mejores resultados en pruebas concretas, aún queda un largo camino para que las máquinas tomen el control.
A medida que las políticas regulatorias avanzan y, teniendo en cuenta que la inteligencia artificial se alimenta de los datos que generamos, uno de los puntos clave a tener en cuenta será hacer un uso responsable, ético y legal de los datos de los usuarios. Factores a tener en cuenta serán:
- Respetar la privacidad, sobre todo en lo referente a datos sensibles como los financieros y médicos.
- Haciendo un uso responsable de los datos, desarrollando mecanismos que controlen y regulen un uso ético de los mismos.
- Controlar su precisión, cuidando que los datos usados sean correctos, verdaderos y actualizados
- Ser equitativo en la información ofrecida, ya que esta información hace que el usuario genere opiniones en función de ella.
- Ser transparente en el tratamiento de los datos, siendo este último punto quizás en el que más se está trabajando en los últimos tiempos.